La reconstrucción del convento será financiada por ochenta comunidades de regantes de Alicante, Almería y Murcia, que integran el Sindicato Central de Regantes del Trasvase Tajo Segura, Scrats.
Esta fue la primera iniciativa que se llevó a cabo en la ciudad para recuperar un monumento. Se hará gracias a la campaña ‘Céntimo solidario’ que puso en marcha el Scrats apenas unas semanas después de los terremotos de mayo pasado y que consiste en el pago de un céntimo de euro por cada metro cúbico de agua que consumen los regantes de esas zonas.