Durante un mes se han desarrollado las tareas de excavación en los Abrigos del Pozo en Calasparra. Las labores han servido para completar los trabajos iniciados en la anterior campaña. En concreto, se ha podido constatar que el lugar estuvo habitado, al menos, desde época epipaleolítica, es decir, desde hace 8.000 años, algo que era de esperar por las catas realizadas con anterioridad en el terreno . En estos trabajos no se han encontrado restos materiales significativos, pero han servido para constatar que el lugar ya estuvo habitado hace 8.000 años, apunta Consuelo Martínez, la arqueóloga que ha estado al frente del equipo de trabajo. La aportación del 1% cultural del Ministerio de Fomento y del Ayuntamiento de Calasparra ha hecho posible estas nuevas excavaciones.
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