El Kanka exhorta a la lluvia en Calasparra. El público aguantó el chaparrón bailando y cantando

Casi hora y media estuvo anoche Juan Gómez Canca, más conocido como el Kanka, actuando ante un entregadísimo público que no dudó en bailar e, incluso, cantar (aunque fuera bajo la lluvia), las canciones de su gira «El arte de saltar» . El cantautor malagueño derrochó en Calasparra arte por los cuatro costados, y no sólo cantando.  La buena conexión con el público, mezclado con el almíbar de las canciones de letras optimistas, irónicas, ingeniosas y reflexivas, lograron que el público terminara con una gran sonrisa en la cara y saliera del Rosales, que casi cuelga el cartel de «entradas agotadas», con ganas de cambiar el mundo. Para colmo, la actuación terminó con los músicos y el público bajo la lluvia, elevando al artista a la categoría de gurú y convirtiendo los minutos finales del espectáculo en un auténtico ritual o ceremonia de invocación de energía positiva de la que nadie quería marcharse.

El Kanka presentó en Calasparra las canciones de su cuarto trabajo que sigue la línea de sus anteriores discos: letras directas, comprometidas, poéticas y reflexivas, cargadas de entusiasmo, con toques de humor y algún que otro «tirón de orejas», junto a una música sin estridencias ni artificios que cuenta con influencias sureñas y del folclore sudamericano, sospechosa de haber bebido de Atahualpa Yupanqui, Chavela Vargas o del mismísimo Carlos Mejía Godoy y los de Palacagüina, y en la que incorpora el particular sonido de instrumentos como el ukelele, el charango, el bombo legüero o los batás, dando un toque étnico y exótico a la mezcla. ‘Por tu olor’, ‘Canela en rama’, ‘Quién me manda a mí’, ‘Sí que puedes’ o ‘Para eso canto’, fueron algunos de los temas que hicieron anoche bailar, cantar, disfrutar y sonreír a sus parroquianos,  que no dejan de crecer por momentos. El Kanka ha conseguido situarse como uno de los artistas más sonados del panorama actual. Su presencia en los más consagrados festivales es ya una constante.

Cantando bajo la lluvia

A la actuación del Kanka le siguió la del Canijo de Jerez que remató la noche con su estilo desenfadado y canalla. Al final, ambos artistas terminaron compartiendo escenario y echándose un pulso musical que terminó en tablas bien entrada la noche.

El Canijo de Jerez

El Kanka